En este blog hemos ido dando detalles de la calidad que Tonality Natural Facades aplican en todo su proceso productivo. Hoy vamos a centrarnos en las placas una vez que han superado los 70 minutos de cocción en el horno a más de 1200º. Es importante destacar que la fábrica está automatizada sabiendo en cada momento las máquinas cuando están preparadas las placas para su siguiente etapa.

Durante todo el proceso las placas son sometidas a controles de verificación de medidas y curvaturas tanto de forma automática como manual, con técnicos cualificados.

Todos los trabajos que se realizan son bajo pedido con un mínimo de desperdicio de material, cortado a medida para que llegue a todas las rehabilitaciones de fachadas para su desembalaje y puesta en obra con un mínimo número de piezas a retocar o adaptar in-situ.

Todo el cuidado y mimo que tienen con las placas en fábrica debe trasladarse durante el transporte, por ello el proceso de embalaje es crítico. Deben empequetar las placas de tal forma que lleguen a la obra sin ningún deterioro o desperfecto. Para comenzar entre placa y placa aplican una espuma plástica de polietileno, con la que evitan el roce entre placas en el transporte evitando rayas y fisuras. Cuando las placas se transportan sin protección se van rozando unas con otras y poco a poco se va rompiendo la superficie que tienen y es por ahí por donde comienza a filtrase poco a poco agua. Es habitual ver fachadas ventiladas que tras unos años empiezan a tener un color «verde» debido a esta falta de protección de las placas en en transporte.

Posteriormente se realiza en paletizado de las placas gracias a un brazo robótico, donde se ponen todos los esquineros de forma automática y para finalizar el proceso de paletizado se protege todo el palet con plástico protector.

Con todo este proceso nos garantizan la calidad de las placas desde la cantera hasta recepcionarlas en nuestros proyectos de rehabilitación de fachada ventilada donde BIDARTE REFORMAS trabaja tanto en Bizkaia como Cantabria.